Previo a visita de AMLO a presa Pilares, INAH suspende de forma administrativa su operación
Considera que hay sitios arqueológicos en riesgo de destrucción por el agua que ya se está almacenando en el lugar; si no se detiene a la brevedad no habría forma de recuperar todo ese patrimonio histórico
Ante la afectación del patrimonio arqueológico en la cuenca alta del río Mayo por la reciente puesta en marcha en operación de la Presa Pilares, el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en Sonora realizó un acto de autoridad de suspensión.
El anuncio de esta suspensión se hizo por la dependencia federal a través de un comunicado, emitido un día antes de la llegada del Presidente de la República a Sonora, en donde visitará la región serrana de Álamos, para conocer la obra que ya se encuentra totalmente construida y en operación.
De acuerdo con el INAH, el rescate del patrimonio arqueológico debió hacerse antes del proceso de construcción de la presa, debido a una serie de importantes hallazgos que se dieron antes de 2014; sin embargo, no se logró firmar ningún convenio de colaboración.
“El INAH hace este acto administrativo para detener la operación de la presa, lo que es llenado, porque ya la construcción terminó. Ya no se puede detener la obra, ya está construida, ahora se detiene la operación.
“Ahorita podemos entrar ya en negociaciones para hacer el convenio de colaboración, para poder salvar estos grabados y estos sitios habitacionales”, explicó el arqueólogo del INAH, Tomás Pérez Reyes.
La colocación de sellos es el inicio ya de una etapa administrativa, agregó Pérez Reyes, en la cual todavía hay posibilidad de lograr un convenio entre las partes, en este caso el INAH, la Comisión Estatal del Agua (CEA) y el Fondo de Operación de Obras Sonora SI (FOSSI) .
“Ahorita necesitamos entrar en negociaciones porque la CEA y el FOSSI deben, como ellos fueron afectando… ya afectaron estos sitios, deben de cubrir el gasto de este salvamento”, dijo Pérez Reyes sin cuantificar el monto que deberán erogar las dependencias estatales.
Explicó que para poder realizar la labor de salvamiento requieren de cinco meses de trabajo en campo en las zonas en riesgo, para hacer excavaciones, el registro digital de los petrograbados, dibujos, fotografías, así como 10 meses más para hacer análisis e informes.
Del primer recorrido arqueológico, los especialistas del INAH registraron 44 sitios, 34 identificados como áreas habitacionales prehispánicas y 11 con presencia de manifestaciones gráfico rupestre. Además se encontraron materiales arqueológicos como lítica tallada, lascas, cerámica tipo Batacosa, San Miguel, Venadito, San Bernardo y Cuchujaqui, así como cerámica monocroma, metates, puntas de talla, puntas de proyectil y morteros.
De ese total, 20 sitios – la mayor parte conformada por petrograbados – se encuentran inundados y afectados por el embalse que tiene en este momento la Presa Pilares.